lunes, 26 de octubre de 2009

Las Olas.

Tu amor fue como una ola de mar. Me acerqué a la orilla temerosa y con los pies fríos... fuí teniendo cada vez más confianza y avancé, mientras más agua había menos frío sentía y terminé por sumergirme con total tranquilidad. Pero el viento sopló más fuerte y se formó un gran puño de agua que no vi crecer detrás de mí, y me golpeó y me arrastró, quien sabe cuántos metros y qué tan profundo, pero no podía agarrar nada ni encontraba la forma de flotar para poder respirar, y me dio tantas vueltas como quiso y me llenó los oídos de agua entre revolcón y revolcón, y cuando por fin pasó ya estaba demasiado lejos del punto de partida y sin fuerzas, ni ganas, ni aire...

No hay comentarios:

Publicar un comentario